Como no tengo mucho tiempo para escribir, voy a empezar a aglutinar miles de ideas en cada entrada. Ya sé que queda un poco inconexo pero al menos los títulos no están mal y ahorro tiempo.
Corren malos tiempos para la lírica. Y para
la investigación en células madre japonesa tampoco es que las cosas vayan
excesivamente bien.
No hace mucho, los novedosos trabajos de Haruko
Obokata que permitían obtener células madre a partir de estímulos
externos como una brusca disminución del pH, tuvieron que ser retirados ante la
incapacidad de ser replicados. Ahora la jugada, similar pero muy diferente, afecta
a un premio Nobel.
En principio, ambos hechos no han de ser
comparables. El error en un artículo publicado en la prestigiosa revista EMBO
Journal, no parece equiparable a la manipulación “a sabiendas” de datos
y resultados de cara a obtener prestigio o fondos. Yo creo, de creer, porque
evidentemente no lo sé, que pudo existir un error sin mala fe en el artículo.
Ha pasado en muchos y quizá en este caso lo llamativo es la presencia de un
premio Nobel entre los firmantes.