SPORTING DE GIJÓN 2014-2015

Nuevo año para el Sporting. Recuerdos del pasado. Recuerdos de esas épocas que queríamos olvidar con personajes como Germán Ojeda en tribuna y gente (profesionales pero no futbolistas para el Sporting) como Jurado, Soto o Álvaro sobre el verde. Este año ni tan siquiera se ha podido apostar por la opción de traer nombres desconocidos. La tan cacareada recuperación económica que iba a seguir al ascenso se quedó en nada más que mentiras perfumadas y milongas de tercera que pocos nos creímos ni en los mejores momentos. Nuevamente, los que hundieron la nave la guían un poco más abajo y con ellos viajamos todos los seguidores de un club que recuerda a un país del tercer mundo. Buenos recursos, mucho corazón pero un gobierno absolutamente inútil y dañino.

Pero es lo deportivo lo que debería mandar y lo que al final se ve sobre el césped. El Sporting de este año ha perdido a nombres como Casquero, Bustos o Garai, que pasaron con más pena que gloria por la temporada pasada. Se ha ido Canella, capitán y referencia aunque en clara decadencia futbolística innegable incluso para aquellos que confiaban en él como futuro lateral internacional. En la zona de la definición se han ido, se van a ir o no van a volver, con los que mandan nunca se sabe, Stefan y Lekic. Gol y garra. Clase y lucha. Las referencias de un equipo en ataque han desaparecido y pagar el gol es caro y difícil. Todo hace indicar que se les echará de menos.

Pero hay que ver quién se queda. Abelardo se queja un día sí, y otro también, de que tiene lo que tiene y que no ha conseguido nada de lo que él deseaba. Como jugador y entrenador forjado en Mareo, no entiendo qué esperaba. Como jugador salió, lógicamente, para dar el salto a uno de los equipos más grandes del mundo. Luego en su paso final decidió irse al Alavés y no a su casa. Da igual que no le hicieran ofertas a uno de los jugadores insignia de Mareo o que él no las aceptara. Lo que queda claro es que el Sporting ha pasado años en los que no era capaz de atraer ni a los de casa, así que no sé que esperaba "El Pitu" cuando se sentó en el banquillo de un club devaluado económica e institucionalmente. Abelardo mostró en segunda un patrón de juego directo y basado en la defensa. Eso es lo que dará este año. Los parches puestos antes de la herida por parte del patrón del banquillo rojiblanco suenan tan a reales como a disculpas. Hemos pasado de un Preciado que motivaba a sus jugadores para hacerles creer lo imposible a un entrenador que asegura de antemano que no hay nada que hacer. A lo mejor solo es de cara a la prensa y nos ha engañado a todos. Quizá solo quiere quitar presión. Lo que he de reconocer es que no se necesita vender humo para lanzar un mensaje honesto de que el equipo va a salir a morir y que la nueva hornada de Mareo lo intentará, obviando contar lo que todos sabemos. El equipo es el que es, y nadie lo niega, pero si lo que nos cuentan es que hay que empezar a resignarse, mal empezamos. Para mirar al descenso al fútbol no profesional ya habrá tiempo. Y si no siempre está la posibilidad de que nos desciendan en los despachos. En Gijón ya sabemos que nos ronda "la bicha", así que no hace falta mentarla cada poco.

Pero más allá de los micrófonos está por ver la labor de Abelardo. En pretemporada el equipo se ha mostrado rocoso y serio con algunos hombres dignos de esperanza. Mi esperanza es que esos hombres ocupen el sitio de algunos nombres que ya no dan nada al rojo y blanco.

En puerta Cuéllar parece tomar el sitio a Alberto. El catalán es jugador de equipo, capitán al año de llegar. Querido pero sin sitio le cede el puesto al Pichu, capaz de gestas y desgracias. Un puesto relativamente bien cubierto pero que al menor patinazo puede llamar a duda.

La defensa, habitual talón de Aquiles ya hace aguas hasta el cuello. A día de hoy parece que la línea defensiva habitual será la compuesta por Lora y Menéndez en laterales y Bernardo y Luis en el centro. Lora se ha precipitado a un abismo del que no sale. El lateral correoso y ofensivo se ha quedado en "lateraluco" y hace tiempo que Sevilla o Valencia no lo tienen en la lista. Menéndez es nuevo, impulsivo y ofensivo. Estamos tan acostumbrados a encontrar agujeros a la espalda de Canella que creo que ni hemos salido perdiendo ni vamos a notar la diferencia. Pero no hay repuesto para Alex, no nos olvidemos. Bernardo es un central completo. Muy bueno por alto. Un buen defensa. Luis es pundonor y entrega con limitaciones. De vez en cuando se marca una salida de balón más que interesante. Pero no es central y eso se nota. Luego está Iván, modelo como profesional pero en la cuesta abajo de su carrera que nunca llegó muy arriba. Pocos creen en él. Los jóvenes, Julio y Meré, son muy jóvenes. Cuando rompa el huevo veremos que sale. Pero no hay más. Con estos mimbres nos jugamos la liga atrás.

En el medio overbooking. Mandi  (con el que no se cuenta), Sergio, Rachid, Barrera (que igual sale), Cases, Pablo Pérez, Ndi, Touré (con el que no se cuenta) y Serrano (que igual baja al B). Puede que hasta me deje alguno. Abelardo quiere jugar con dos puntas. Lo que deja nueve jugadores de plantilla para dos puestos. Es cierto que Ndi, Pérez o Serrano han sido probados como segunda punta, pero no parece lo lógico. De jugar con tres medios, razonamiento plausible para un equipo que, supuestamente, va a salir a cerrar huecos, lo lógico si no sale nadie sería contar con Sergio, Rachid y Barrera. Sergio ha demostrado entrega y lucha en cada partido. Quizá anda corto de control de pelota y se despista en momentos pero ha crecido mucho como futbolista. Barrera es indispensable porque no hay otro igual en el equipo. Que no sea titular si se queda parece una idea de bombero torero, pero peores cosas se han visto.  Rachid es la sorpresa de pretemporada junto a Ndi. Un jugador duro, correoso y serio. Parece un buen medio para cortar y sacar la pelota. Dado el nivel paupérrimo de los últimos años de Cases y que está más hecho que Pablo o Ndi, debería jugar.

Por las bandas mucho o poco, según se mire. Para la derecha Carmona y  Jara. Ambos con mucha clase. Carmona con mucha más que Jara. Si se centra, Carmona es un jugador superlativo para segunda división. A Jara le quedan muchos kilómetros para centrarse y ser el jugador que prometía ser. En la izquierda están Jony y ¿Bustos? ¿Isma? ¿Muñiz?. Parece que Jony va a ser el titular y he de decir que no me convence. No me parece tan rápido como lo pintan. No me creo que tenga una zurda de seda y no lo veo jugador de primer nivel. Me equivocaré, seguramente, pero creo que fue flor de un día. Claro que los demás, salvo Álvaro Bustos, quizá no lleguen ni a eso.

Y arriba sonido de trompetas. Voy a considerar que Scepovic no está. Si se queda, lo lógico es que sea el delantero titular. En Guerrero no confía nadie. O eso parece. El chico quiere y lo intenta. Y quizá lo logre. Es peleón, tiene algunos detalles. No es un mal futbolista. Pero está obcecado y así no se va a ninguna parte. Si le sonríe el gol pronto quizá hayan esperanzas. El otro sería Carlos Castro que ha jugado menos de quince partidos en segunda B. Puede ser el nuevo Villa. O no. Otra opción es poner a Ndi y ver qué pasa. En esas estamos. No hay nadie más. Si estos chicos no funcionan el gol va a ser cosa del Espíritu Santo.

Mal empiezan las cosas cuando te conviertes en el único equipo, en un fútbol en crisis total, que no puede fichar. Hoy empieza todo. Cuarenta y dos partidos para ver si Mareo nos da una gran alegría o nos deja al borde del abismo. De todas formas, pase lo que pase y fallen Abelardo, Cases o Cuéllar, la culpa total no la van a tener los que bajan al prado. Aquí hay unos señores que llevan veinte años deshaciendo un club y desapareciendo unos ingresos que existen y que se dilapidan, se despilfarran, se volatilizan o se mal invierten, pero que no dan para más que para lo que nos venden.

Con todo, ¡Puxa Sporting!, y a ver que pasa.